jueves, 26 de octubre de 2017

TIEMPOS INCIERTOS

Tengo algunos amigos preocupados
con las cosas que ocurren. Como yo
han llegado al ocaso de la vida
a la jubilación, en buen estado,
mas todo es frágil y la vida pasa.

También yo estoy inquieta con el mundo,
llega un momento en qué deseas solo
sobrevivir al lado de la estufa
jugando con los nietos y, además,
poder creer que ellos serán felices
en un futuro sin dolor ni pena.

La realidad jamás es previsible,
hubo guerras que nadie preveía
y revueltas que no causaron víctimas.
Hoy mismo, en un montón de poblaciones
arden las casas y los niños mueren
y la gente que puede se traslada
a lugares que cree más amables.

Recuerdo miedos relativamente
cercanos. Sufrimientos de mis padres
que fueron entusiastas con los cambios
en épocas de luchas y proclamas
y que después tampoco deseaban
ruido. Parecían muy cobardes
ante mis ojos tiernos e ignorantes.

Acaso ha habido tiempos más pacíficos?
Años sin hambre, muerte ni violencia?
Existen los países inocentes?
Los héroes no tienen siempre sombras?
Son algo más, las patrias, que abstracciones?
Se merecen los dioses sacrificios?

Salgo a la calle los días silenciosos
cuando la gente olvida las consignas
y nadie aviva fuegos con palabras
y la gente es amable y solidaria.

Sin embargo contempla mi impotencia
vagabundos que duermen en la calle,
mendigos en la puerta de la iglesia
salidos de novelas de hace siglos,
prostitutas que pueden ser mis hijas
de países lejanos, niños tristes
y ancianos olvidados por la historia
que pasean sin prisa ni esperanza.

Así es el mundo, no nos engañaron,
incierto, deseable, poco sólido,
la vida es breve y la muerte llega
más tarde o más temprano. Todo cambia.

Y, sin embargo, hay momentos felices,
paz en algún domingo luminoso,
poesías hermosas en los libros,
mensajes agradables en teléfonos
modernos, esos aparatos
que nos abren ventanas infinitas
a un mundo tan extraño y temporal.

Y flores en las tumbas, estos días,
en qué dedicaremos un recuerdo
a los antepasados, a la gente
que compartió algún día, con nosotros,
ese peso de tanta incertidumbre.

Julia Costa, poemas inéditos en castellano, 2017